lunes, 27 de febrero de 2012

ALEJANDRA FERREIRO: "Y la luna fue mi cómplice"

Su muerte sonó a cristales rotos.

En la noche aullaba la luna llena, llamaba a los lobos. Asunción quiso esconderse en la oscuridad de un rincón. Se agazapó como una niña jugando al escondite, con la cabeza entre las piernas abrazadas. Quería hacerse pequeñita, una mota de polvo, una gota de lluvia. Desaparecer.

Lo consiguió durante unos instantes. Pero la luna volvió de entre las nubes para delatarla. La buscó furiosa, encontró su pelo. Y las asesinas que la perseguían dieron con ella en seguida. Los lobos, en la noche, respondían a la llamada. Mientras, dentro, dos manos crueles quebraban el cuerpo crispado de Asunción.

Cuando terminaron el trabajo, avergonzadas, se escondieron en mis bolsillos. No soportaron la visión de la sangre que ensuciaba las esquinas. La sangre que les gritaba:

¡Asesinas! ¡Asesinas!

Alejandra Ferreiro: Escribo desde siempre pero nunca me había presentado a ningún concurso ni había pensado en publicar, supongo que era algo demasiado personal.

1 comentario:

Vistas de página en total